Si le dedicas un poquito de tiempo a estudiar los gastos que tienes, valorar cuáles son prescindibles y ver los que puedes reducir, te darás cuenta de que ahorrar es posible.
El camino al ahorro:
• Tu primera máxima debe ser gastar menos de lo que ingresas
Esto parece una obviedad, pero, cuando los precios suben y los salarios se estancan, el camino al ahorro se convierte en una montaña difícil de escalar. Entonces, ¿qué podemos hacer? Tenemos dos opciones: no hacer nada o ver que hábitos podemos cambiar.
• Cambia los hábitos: la elección correcta
Si quieres cambiar tus hábitos sin que disminuya tu calidad de vida debes establecer un plan de acción efectivo e inteligente. Seguro que alguna vez has llegado a fin de mes sin un euro en tu cuenta; ésto te pasa por falta de planificación.
• Realiza tu plan
Una vez entendida la importancia de la planificación, pasamos a elaborar EL PLAN: 7 puntos fundamentales que deberías seguir de forma ordenada y precisa:
1. Haz un estudio en profundidad de tus gastos
2. Sepáralos en tres listas con sus cantidades: imprescindible, prescindible y ‘tengo dudas’
3. Calcula tus ingresos totales
4. Calcula cuánto quieres/puedes ahorrar
5. Establece un presupuesto de lo que puedes/debes gastar e intenta repartirlo en las tres listas
6. Reajusta lo necesario
7. A partir de aquí, reduce la cantidad de gasto en los gastos que puedas
• ¡Y ponte a ahorrar!
Con este plan en marcha los resultados irán llegando de forma progresiva. Mes a mes comprobarás cómo los cambios efectuados son verdaderamente exitosos y podrás lograr un ahorro exponencial.