Denuncia de irregularidades

Las manipulaciones irregulares de las instalaciones de gas son muy peligrosas para las personas que las realizan, para las personas que conviven con ellas y para sus vecinos. Pueden provocar fugas, y éstas, posibles incendios, y en casos extremos, explosiones.

Los artículos 255 y 623 del Código Penal recogen el delito y la falta de defraudación de energía, mediante la manipulación de las instalaciones o de los contadores, y establecen las correspondientes penas.

El usuario que defrauda energía perjudica económicamente al resto de los consumidores, debido a que la actual configuración del marco tarifario compensa las pérdidas de gas a través de los precios que se establecen trimestralmente para las tarifas generales de acceso, provocando de este modo un aumento de las mismas.

La comisión de fraude de gas por parte de una empresa, industria o comercio representa una competencia desleal frente sus competidores que actúan dentro de la legalidad.

La manipulación de una instalación y/o una conexión irregular a la red de distribución puede provocar incidentes en las propias del cliente y comunes de los vecinos.

El RD 1434/2002 de 31 diciembre 2002, en su artículo 56.1, habilita a las distribuidoras a suspender el suministro a sus usuarios, entre otros, en los siguientes casos:

• Cuando se establezcan derivaciones para suministrar gas a una instalación no prevista en el contrato.
• Cuando las instalaciones receptoras o aparatos consumidores de gas no cuenten con las autorizaciones necesarias.
• Cuando se manipule el equipo de medida o control o se evite su correcto funcionamiento.

El titular del contrato es garante de la custodia del equipo de medida y responsable de la instalación de gas de su vivienda, por lo que es responsable de los fraudes que se cometan en estos elementos.

En el caso de que alquiles, adquieras, heredes o recepciones una vivienda es aconsejable realizar una inspección de la instalación para verificar que está en perfectas condiciones.

El titular del contrato debe poner en conocimiento de la compañía distribuidora cualquier situación de fraude, con el objetivo de que pueda ser corregida rápidamente, ya que él es el responsable del equipo de medida y de la instalación.

Cuando un usuario toma parte de su suministro de la instalación receptora de un vecino está cometiendo un delito de robo entre particulares.

El usuario víctima de un robo de energía debe poner este asunto en manos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado al tratarse de un delito. La distribuidora puede realizar una inspección profesional de la acometida y de la instalación que puede servir para presentar la denuncia y como prueba pericial del juicio.

Puedes notificarnos cualquier irregularidad o fraude accediendo a nuestro formulario.