¿Necesitas tener entretenidos a los pequeños de la casa? No hay mejor plan casero que cocinar con ellos un bizcocho a la sartén en tu cocina al gas natural. Es una receta muy fácil que te explicamos con fotos paso a paso
Una recomendación: los tiempos que te damos son aproximados y dependen un poco de los fuegos de cada casa.
Ingredientes para una sartén de 20 cm
• 200 ml leche entera
• 2 cucharaditas de vainilla
• 100 g azúcar
• 25 g maicena
• 150 g harina repostería
• 2 cucharaditas de levadura química
• Una pizca de sal
• Una cucharada de aceite vegetal (girasol)
• Mantequilla para engrasar la sartén (o aceite vegetal si lo prefieres)
Los ingredientes los puedes personalizar añadiendo un par de cucharadas de cacao en polvo, o un toque de canela, ralladura de limón o naranja… y decorarlo a tu gusto.
Elaboración paso a paso
1. En un bol o en la cubeta del robot de cocina mezclamos la leche y el azúcar hasta que se disuelva bien. Añadimos la vainilla y mezclamos.
2. Añadimos también el aceite y seguimos batiendo.
3. Por último, tamizamos la harina, maicena, levadura y sal, y mezclamos bien hasta que no queden grumos.
4. Ponemos una sartén antiadherente (esto es importante) al fuego engrasada con aceite o mantequilla y dejamos que caliente a fuego medio.
5. Pasamos la mezcla a la sartén y tapamos. El bizcocho se va a ir cociendo al vapor. Ve controlando a menudo la cocción para evitar que se queme. Dejamos cocinar 5 minutos y bajamos a fuego lento.
6. A los 5 minutos, volvemos a bajar la temperatura o cambiamos a un fogón más pequeño, para que no se pegue. Pasados otros 5 minutos notaremos que va empezando a cuajar y que está medio cocido por la superficie, como para darle la vuelta.
7. Despegamos con cuidado por las paredes de la sartén y damos la vuelta al bizcocho con la ayuda de un plato llano, como si fuera una tortilla. Dejamos hacer por el otro lado, de nuevo tapado unos 5-10 minutos más a fuego lento.
8. Dejamos enfriar antes de servir.
La cocina de gas natural calienta muy fácilmente los alimentos y además permite el máximo control de temperatura a través de la llama. Además, proporciona a tus alimentos una cocción más tradicional.