Si después de evaluar las ventajas que te aporta gas natural y los beneficios económicos y de sostenibilidad que obtendrás, ya te has decidido por cambiar tu cocina quizá te preguntes cómo puedes contratar el servicio.
Para completar este proceso con éxito tienes que dar una serie de pasos concretos que variarán en función de si tu cocina cuenta ya con la instalación de gas natural hecha o no. Antes de cambiar tu cocina a gas natural tendrás que asegurarte de en qué caso te encuentras:
CASO 1: Mi cocina ya cuenta con la instalación de gas natural hecha pero no uso el gas natural en casa.
Antes de elegir la cocina que te guste y de que la propia marca o empresa vendedora del electrodoméstico envíe a un técnico a tu casa para que te la instale, debes contratar el gas natural con una empresa comercializadora. Esta empresa será la encargada de dar de alta el servicio. ¿Quieres saber la diferencia entre una distribuidora de gas natural y una comercializadora?
CASO 2: Si ya usas el gas natural en casa (para la calefacción o el agua caliente).
En este caso tan solo tendrás que comprobar si la instalación de la cocina está hecha o no.
Si la instalación ya está hecha, solo tendrás que conectar los gasodomésticos, porque ya tienes contratado gas natural en casa.
Si por el contrario la instalación no llega a la cocina, necesitarás que un instalador certificado extienda la instalación de gas natural hasta allí. El proceso es muy sencillo y rápido, ya que solo se trata de colocar el tubo por donde llegará el gas natural hasta cada aparato.
CASO 3: Mi casa no cuenta con la instalación de gas natural.
En este caso, lo primero que debes saber es si tu casa dispone de la acometida de gas natural necesaria hecha para poder tener el alta. (Casi todos los edificios de obra nueva cuentan ya con esta acometida, lo cual supone una enorme ventaja a la hora de poder cambiar de energía con facilidad.) Contacta con la distribuidora que corresponda a tu zona para comprobarlo y, en caso de que lo necesites, solicitar la activación del servicio y la conexión de tu casa a la red de distribución de gas natural. La distribuidora enviará a un instalador autorizado a tu casa que será el que te dé el presupuesto de instalación.
Una vez tengas la instalación hecha deberás pedir el Certificado de Instalación correspondiente, y llamar a una empresa comercializadora para ultimar la contratación del gas natural. ¡Y ya podrás disfrutar de la cocina de gas natural!
