La llegada de un recién nacido suele despertar, en la mayoría de los casos, una sensación de inseguridad en los padres a la hora de proporcionarle los cuidados necesarios en sus primeros meses de vida, sobre todo en los que son primerizos. Y una de las dudas que más surge es la temperatura ideal para el baño del bebé.
La rutina del baño es una de las más importantes para los bebés ya que disfrutan un montón y se relajan en el agua. Para que la hora del baño sea un éxito, deben tenerse en cuenta ciertos aspectos como en ambiente, la luz, los estímulos o la temperatura del baño.
Es importante conseguir una temperatura estable y continua en el agua y no quedarse a medias como pasa cuando se acaba la bombona de butano. Con gas natural tienes suministro continuo sin limitaciones y agua caliente de manera instantánea.
Con la instalación de gas natural para el agua caliente, podrás olvidarte de comprar y cargar las bombonas, y además ahorrarás en el consumo al ser una energía más económica.
La temperatura ideal del agua para bañar a un bebé.
La temperatura ideal del baño del bebé será aquella que no le resulte ni muy fría ni muy caliente por lo que, lo primero que debemos tener en cuenta, será la temperatura basal de su cuerpo, que oscila entre los 35 y los 37 grados en condiciones normales. Por ello, si vamos a medir la temperatura con un termómetro, debemos dejarla en ese margen. Con el gas natural conseguirás fácilmente regular la temperatura del baño del bebé.
¿Debe ser la misma temperatura en invierno que en verano?
La temperatura para el baño de un niño o niña pequeño debe estar comprendida entre los 35 y los 37 grados para evitar lesiones, independientemente de si es verano o invierno. Sobre todo, hay que tener especial precaución en bebés recién nacidos, ya que no pueden regular bien su temperatura corporal.
Temperatura ambiente en el baño del bebé.
El espacio donde bañes al bebé tiene que estar a una temperatura agradable, lejos de corrientes y donde no haga ni mucho frío ni mucho calor para evitar cambios bruscos de temperatura y esto nos lo aporta la calefacción de gas natural, la más confortable, sin cambios bruscos de temperatura y sin corrientes de aire incómodas.
En un momento tan esencial y cotidiano como resulta el baño, es necesario tener en cuenta tanto la temperatura del cuarto de baño como la del agua. Se recomienda que la de la habitación esté entre unos 20 y 25 ºC, para crear un ambiente cálido y confortable en el que el bebé disfrute y se relaje.