Horno de gas natural vs. horno eléctrico ¿Cuál es mejor?

En general, los hornos de gas natural cuentan con amplísimas ventajas frente a los hornos eléctricos, de ahí la preferencia en los entornos profesionales por los hornos a gas natural.

El horno eléctrico cuenta con ventajas a la hora de su instalación, de ahí que en los últimos tiempos la preferencia por los mismos en determinadas instalaciones domésticas haya predominado, pero las desventajas continúan siendo las mismas que en el pasado entre las más destacadas las que mencionamos a continuación:

• El horno eléctrico tarda mucho más tiempo en calentar que el de gas. Los hornos de gas no requieren precalentamiento porque estos alcanzan muy rápidamente la temperatura deseada, además pueden alcanzar una temperatura mucho más alta más rápidamente.
• El horno eléctrico siempre estará pendiente de que el consumo eléctrico sea continuado, cuando se produce un apagón, sea de una zona concreta o del inmueble o empresa en el que estemos, nos veremos forzados a interrumpir el cocinado. El horno a gas natural cuenta con un suministro continuo que no está sometido a posibles interrupciones. Esto lo hace la opción preferida en determinados negocios como las panaderías, por poner un ejemplo, donde las interrupciones se ven penalizadas con la disminución de los ingresos y que tienen horas muy concretas en las que abastecer a su público.
• El horno de gas natural es mucho más amable con el medioambiente.

Principales características y diferencias

Consumo de energía

En cuanto al consumo energético el KW de gas natural es mucho más económico que el de electricidad y además no fluctúa según las horas. Si se evalúa el consumo, el horno de gas natural destaca porque consume menos de un tercio que uno eléctrico y, además, no necesita casi precalentamiento.

Ventajas y desventajas del horno de gas natural

Entre las ventajas del horno de gas natural podemos destacar las siguientes:

• Funcionan con el gas natural que está canalizado por lo que su suministro es constante. Además, el horno a gas no depende tanto de los horarios como el horno eléctrico en el que la hora a la que se cocina determina su rentabilidad.
• Es fácil comprarlos como hornos sueltos sin necesidad de estar unido a la cocina de gas.
• Un horno de gas natural de gama media cuesta en torno a 600 euros, con lo que es igual de accesible que uno eléctrico e incluso podemos obtenerlos más económicos en el mercado de segunda mano.
• El consumo de un horno de gas natural es más bajo que en un horno eléctrico por lo que es una opción muy recomendable si a la vivienda llega la canalización del gas natural o puedes dar de alta el gas natural.
• Los hornos a gas natural son más rápidos y eficientes en cocciones largas.
• Los hornos a gas alcanzan temperaturas mucho más altas. Un horno doméstico puede alcanzar una temperatura de 350 grados con facilidad, algo muy importante para cierto tipo de cocciones como pizzas y panes.

Las desventajas del horno de gas frente al eléctrico son realmente escasas siendo sólo destacable, quizás, que su limpieza sea un poco más complicada a la hora de limpiarlos, suelen tener partes donde aceites y grasas son más difíciles de remover. Aún así, al igual que en los hornos eléctricos contamos con opciones de autolimpiado como la función aqualisis que utiliza el vapor de agua para limpiarse o la pirólisis, por la que se limpian solos calentándose a una elevada temperatura que carboniza la suciedad.

A esto habría que sumarle que la instalación tiene que ser realizada por parte de un técnico especializado, pero la misma operación tendríamos que hacerla con uno eléctrico, siendo simplemente más común que en la actualidad los hornos eléctricos ya vengan preinstalados en las casas, no siendo así en los negocios o empresas donde ya tenemos que pensar previamente qué tecnología queremos utilizar.

Ventajas y desventajas del horno eléctrico

Las ventajas del horno eléctrico serían las siguientes:

• Existen hornos realmente pequeños, cuando no cuentas con espacio en la cocina y debes conectarlo a la red eléctrica.
• La limpieza es realmente sencilla, especialmente en aquellos hornos pequeños en los que cuentan con pocos elementos para limpiarse por separado.
• El calor perdura en el tiempo al apagarse, pudiendo aprovecharse para que los platos se mantengan calientes.

Entre las desventajas podríamos mencionar las siguientes:

• El sistema eléctrico puede jugar una mala pasada en los cableados y ocasionar fallos que requieren costosas reparaciones más frecuentemente de lo que desearíamos.
• Estaremos siempre pendientes de posibles apagones, con las consecuencias económicas que eso puede generar, tanto en la pérdidade los alimentos como en los posibles pérdidas económicas que podemos acarrear en caso de que, por ejemplo, nos dediquemos al servicio a domicilio de comidas, tengamos un restaurante u otro tipo de negocios que trabajan contrarreloj como una panadería o una pastelería.

¿Cuál es más económico?

Si tenemos en cuenta el precio del horno en sí, probablemente encontremos opciones más económicas y mayor variedad en los hornos eléctricos, aunque como ya decíamos la calidad de ambos a la hora de cocinar no tiene nada que ver. Además habrá que valorar el uso que le vamos a dar, si es industrial, doméstico, para un pequeño negocio… a la hora de determinar o responder a una pregunta tan importante.

Si lo que tenemos en cuenta es el consumo, el horno a gas natural es claramente el ganador en esta pregunta, tanto por su rápido calentamiento como por el menor coste del gas, sumado a que no tenemos que estar tan pendientes de a qué hora lo usemos.

Conclusiones

El horno de gas natural no es comparable al horno eléctrico, ambos cuentan con ventajas y desventajas pero si somos amantes de la buena cocina, disponemos de un negocio o hacemos un uso habitual del horno lo normal, siempre que contemos con una canalización de gas natural, sería decantarse por el horno a gas frente al eléctrico.